Por estas horas, en Chile, ultiman detalles del decreto que publicaran a fin de mes, y que permitirá la reapertura de sus fronteras para el arribo de turistas extranjeros, entre los cuales se encuentran los argentinos.
Tal cual sucede en Argentina desde el pasado 17 de marzo, las fronteras al vecino país se encuentran cerradas para viajes no esenciales. Solamente pueden hacerlo, chilenos y extranjeros con residencia establecida, a los que se suman algunos criterios especiales que deben ser analizados por la Seremi de Salud como lo son emergencias personales o familiares, condiciones de salud o situaciones laborales, entre otras.
Paula Daza, a cargo de la Subsecretaría de Salud Pública, dijo que el plan que desarrolla el gobierno considera una apertura gradual, por lo que en esta fase solo se levantará la barrera aérea internacional por medio del Aeropuerto Arturo Merino Benítez (Santiago), mientras que el resto de las fronteras continuará cerradas. Es decir que el paso terrestre por el Cristo Redentor, el más elegido por los mendocinos, deberá esperar.
Luego de las especulaciones por elegir destinos, dependiendo de su situación epidemiológica, Daza sostuvo que no habrá restricción al origen de los visitantes y que podrán hacerlo desde cualquier lugar del mundo.
Según informó La Tercera, la funcionaria explicó que pedirán una aplicación móvil a los turistas para monitorear sus síntomas y así seguir sus pasos por el país en caso de contagiarse de Covid-19.
“Lo más importante es el principio de trazabilidad y tenemos que tenerlo muy bien implementado antes de abrir las fronteras: todas las personas que ingresen al país, chilenos y extranjeros, van a estar en un período de vigilancia de 14 días. Van a tener que reportar sus síntomas y ubicación”, dijo Daza, quien añadió que las personas que no notifiquen su estado e incumplan el reporte podrán ser sancionadas.
De esta forma, para cruzar la Cordillera de los Andes solo bastará con presentar un estudio PCR negativo cuya antigüedad sea menor a 72 horas desde la toma de muestra, en un laboratorio reconocido por la autoridad sanitaria local. De lo contrario, la persona deberá guardar 14 días aislado en hotel.
Por su parte, la vicepresidenta ejecutiva de la Federación de Empresas de Turismo (Fedetur), Helen Kouyoumdjian, señaló que los anuncios son positivos. “Si uno sabe que las fronteras se van a abrir antes de diciembre se puede trabajar con un horizonte claro, porque las reservas no se van a dar de un día para otro. Nuestra estimación es que vamos a tener en el orden de un 30% de la demanda normal durante enero”.
“Estamos apostando fuertemente al turismo interno, a que las personas se queden en Chile y recorran el país. Hemos pedido a nuestros afiliados y a toda la industria flexibilidad -es decir, si se cancela el viaje por pandemia, poder reprogramar-, buenos precios y que las empresas tengan los protocolos de seguridad correspondientes”, dijo.
Cabe recordar que en Argentina, por ahora, solo está habilitado el aeropuerto de Ezeiza para viajar al exterior. El gobernador Rodolfo Suárez anticipó el lunes que hizo el pedido formal a la Nación para habilitar vuelos internacionales a Mendoza y el cruce por el paso internacional en Alta Montaña.