El ingeniero especialista en sismología e integrante del Centro de Investigación Sismológica de la Universidad Tecnológica Nacional (CeReDeTeC), Miguel Tornello, pasó por los micrófonos de Radio News, y calificó como “terremoto” el fenómeno ocurrido durante la noche del miércoles en Mendoza.
“El sismo que tuvimos ayer es característico a nivel local, es llamado sismo de intraplaca y de muy poca profundidad. Son los clásicos terremotos que ocurren en nuestra región”, comenzó diciendo.
Con relación al reciente sismo, explicó que se debe a “fallas cercanas a zonas urbanas o a instrumentos de registros sísmicos. Tienen prácticamente las características que fueron sentidas por la población”.
Y siguió: “Son de corta duración, prácticamente sin pre aviso y como con una sensación tipo explosiva, más que vibratoria”.
En un pasaje de la nota, Tornello dijo que el movimiento fue “casi idéntico a lo ocurrido como sismo sensible, y que marcó un hito en Mendoza, en enero de 1985”.
Continuó la entrevista, revelando que “las dos terceras partes de las personas viven en zona sísmica, por lo que es una problemática” que debiera ser abordada en conjunto entre las universidades, los gobiernos provinciales y Defensa Civil.
Y dio a conocer que “la zona de mayor peligro de sismo es la zona de subducción, principalmente cuando hay contacto entre la placa de nazca con la placa americana. Se produce precisamente en la zona costera”.
Señaló que cuando ocurre “algún terremoto importante en la zona costera, afecta el estado tensional en la parte interior de la corteza, lo que no quiere decir que de manera inmediata tengamos nosotros un terremoto como consecuencia de eso”.
Al ser consultado sobre que parámetros se analizan para definirlo como terremoto, expuso: “Llamémosle que todo movimiento sísmico dentro de lo que es la especialidad. Cuando las magnitudes y las intensidades son bajas, se los designa por costumbre sismos, cuando las magnitudes e intensidades son mayores a 6 podemos hablar de terremoto. La diferencia está en que los sismos, como el de ayer, o los terremotos de fallas cercanas, prácticamente no tienen preaviso”.
“No dan tiempo de levantarse de la silla o tomar alguna acción preventiva, son de muy corta duración. En ese periodo desprenden el 100 % de la energía, a diferencia de los terremotos lejanos, donde se siente de alguna manera una vibración o movimiento prolongado en el tiempo”, completó.
Cerró el dialogo, comentando que “el sismo de ayer fue de magnitud baja. Fue sentido en la Ciudad de Mendoza con una intensidad del orden de 3 o 4, lo cual no debería producir ningún tipo de daño o consecuencia”.