Tras siete horas y media de sesión, la Cámara de Diputados aprobó esta noche el proyecto de ley que apunta a retrasar las fechas de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) y de las elecciones generales para el 12 de septiembre y 14 de noviembre, respectivamente.
Con 223 votos a favor, tres en contra y ocho abstenciones, la iniciativa logró la media sanción y fue girada al Senado, donde tiene el camino allanado para su aprobación definitiva.
A partir de un pedido de Juntos por el Cambio, el proyecto incorpora una “cláusula cerrojo” que garantiza que no habrá una nueva modificación al calendario electoral de este año.
La iniciativa también establece que el cambio de las fechas para las elecciones primarias y para las generales será “por única vez”, así como la modificación de los plazos previstos para el registro de los candidatos y la oficialización de listas.
El propósito de la iniciativa es alejar las fechas de los comicios de los meses más fríos del año y, especialmente, contar con un mes adicional para avanzar con la campaña de vacunación, de manera tal que haya un mayor porcentaje de población inoculada al momento de acudir presencialmente a las urnas para las elecciones obligatorias.
A excepción del Frente de Izquierda, el resto de los bloques ya tenía definido acompañar la medida, fruto de un acuerdo político al que había arribado el Gobierno, a través del ministro de Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, con los líderes parlamentarios.
No obstante, dos diputados de Juntos por el Cambio, como Fernando Iglesias (PRO) y Álvaro de Lamadrid (UCR) se diferenciaron al votar en contra, al desconfiar del Gobierno: sospechan que llegado el caso, y si le conviene electoralmente, el oficialismo podría suspender las PASO, a pesar de la “cláusula cerrojo” pedida por su propio interbloque.
El primer opositor en tomar la palabra durante el debate fue el radical Gustavo Menna, quien hizo hincapié en que se trata de una “solución de emergencia” ante una situación excepcional como es la pandemia por coronavirus.
El chubutense destacó la inclusión de la “cláusula cerrojo” y señaló que “tiene que ver con asumir un compromiso político plasmado en la ley”.
“Este Congreso integrado por estos mismos diputados no va a poder volver a alterar el calendario electoral en curso”, remarcó.
Por el Frente de Todos, Marisa Uceda aseguró que con esta decisión la Cámara de Diputados está “demostrando un gesto que nos está pidiendo nuestro pueblo”.
“Nos estamos poniendo de acuerdo que las PASO son un instrumento de democratización tal cómo lo pensó el (ex) presidente Néstor Kirchner en 2009”, subrayó la mendocina, al tiempo que consideró que “nunca hay que intentar suspender” las PASO.
Al igual que Menna, Silvia Lospennato (PRO) resaltó la importancia de la “clausula cerrojo” que conllevará una “autolimitación de este Congreso a realizar nuevas modificaciones al calendario electoral”.
“Lo que estimaos haciendo con esa clausula es dar una señal clara de dos cosas: del consenso político y del compromiso político de cumplir con nuestra palabra”, valoró la diputada opositora, quien aprovechó la ocasión para reclamar la vacunación de las autoridades de mesa y personal de seguridad que participen del operativo electoral.
A su turno, el jefe del bloque de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, explicó que la razón que motivó la exigencia de Juntos por el Cambio para que se incorporara la “cláusula cerrojo” era “la desconfianza” de muchos de los miembros del espacio opositor a que más adelante el Gobierno alegara nuevos fundamentos para justificar la suspensión de las PASO y así cambiar las reglas de juego.
Por otra parte, valoró el hecho de que se acorte el tiempo entre las PASO y las elecciones generales dado que, en su opinión, la sociedad no quiere “soportar” a los dirigentes políticos “en campaña permanente”.
En tanto, el diputado del Frente de Izquierda Juan Carlos Giordano se opuso al proyecto y aseguró que es “una irresponsabilidad absoluta hacer votar dos veces a millones de personas en plena pandemia”.
En este sentido, refutó la idea que oficialismo y Juntos por el Cambio “pretendieron” instalar de que había un acuerdo por unanimidad.
“No hay ningún consenso ni unanimidad porque desde el Frente de Izquierda nos oponemos. Quieren vender que hay una epopeya humanitaria y democrática solo con postergar las PASO por solo un mes”, se quejó Giordano, el tercer voto en contra además de Iglesias y De Lamadrid.
Las abstenciones correspondieron a Nicolás del Caño (PTS-Frente de Izquierda), Mario Arce (UCR), Beatriz Ávila (Partido por la Justicia Social), Héctor Baldassi (PRO), Alejandro Cacace (UCR), Martín Grande (PRO), Graciela Ocaña (PRO) y Héctor Stefani (PRO).
También se sancionó el proyecto que apunta a suspender hasta el 31 de diciembre de este año dos causales de caducidad de los partidos políticos, para que todas las fuerzas queden habilitadas a participar este año del proceso electoral, aunque no hubieran cumplido con los requisitos legales para hacerlo.
La iniciativa, que resultó aprobada por unanimidad con 235 votos afirmativos, busca garantizar que los partidos políticos puedan participar de los comicios aún sin haber podido celebrar elecciones internas de renovación de autoridades, o pese a no contar con el mínimo de afiliaciones, producto de la pandemia de coronavirus.
El orden del día continuaba con el tratamiento de un proyecto para crear un Sistema Nacional de Bomberos Voluntarios, seguido del proyecto que introduce cambios en el impuesto a las Ganancias para empresas.
Después vendría la votación de distintos expedientes sobre transferencias de inmuebles, el proyecto de Consenso Fiscal y finalmente estaba previsto un apartamiento de reglamento para habilitar el tratamiento de un proyecto sobre ayuda a transportes escolares.