El lunes pasado, en horas de la tarde, varios ciudadanos pudieron avistar un mono caí en diversas zonas de la Ciudad de Mendoza y finalmente en el departamento de Godoy Cruz, donde lamentablemente el ejemplar exótico perdió la vida luego de treparse a un tendido eléctrico.
Al principio había trascendido que el animal había pertenecido al Ecoparque Mendoza. Pero si bien en el paseo habitan ejemplares de esta misma especie, el Gobierno de Mendoza asegura que las características del animal indican que no sería del grupo de la institución.
Así se difundió luego de que los veterinarios de la institución recibieron el cuerpo del ejemplar para hacer la necropsia, solicitada por la Dirección del Ecoparque Mendoza.
Según se informó oficialmente, “con la sola observación física del cuerpo del animal, los veterinarios indicaron a la dirección que el animal presentaba características físicas, tamaño, masa muscular y estado corporal que no condicen con las de los ejemplares del paseo”.
El mono fallecido era un ejemplar juvenil, con pelaje brillante, importante tono muscular y sin marcas en ninguna parte de la piel o extremidades. Por lo que solo al mirarlo, los veterinarios se dijeron entre ellos “este es un animal de un domicilio privado”.
Y es que los monos caí que habitan el Ecoparque son ejemplares, en gran parte, de edad avanzada -aunque existen algunos juveniles-, más pequeños en tamaño que el fallecido y con un pelaje ligeramente menos reluciente, ya que son animales que viven al aire libre y se mueven con libertad en todo el predio.
Además, los monos del Ecoparque Mendoza tienen marcas y desgastes físicos, producidos en el pasado por el contacto con el sistema eléctrico del predio, que por décadas ha sido deficiente y ha estado muy deteriorado.
Por otro lado, los veterinarios indicaron que por la distancia recorrida por el primate, resulta prácticamente imposible que el animal sea uno de los ejemplares del Ecoparque, ya que estos animales generalmente permanecen cerca en la zona del Cerro de la Gloria, ya que allí tienen alimento y refugio. Finalmente, el animal se desplazaba solo, algo que no realizan los monos del Ecoparque, que se mueven en manada.