“Néstor Kirchner, apadrinado por José Luis Manzano, asumió el desafió de gobernar la provincia (de Santa Cruz)”. Así se inicia la crónica que realizó diario Ámbito Financiero en diciembre de 1991, en el marco de una nota titulada “Juró otro seguidor de Cavallo”.
En esos días, en los que el fallecido marido de Cristina Fernández asumía el poder en la gran provincia del sur argentino, no había crítica alguna por parte de la ahora mandataria hacia el ex ministro de Economía, a quien gusta denostar públicamente.
“El programa económico (de Néstor) se basará en el ajuste económico que Domingo Cavallo reclama a todas las provincias”, publicó el mismo matutino sin que nadie desmintiera una sola de esas líneas. Dicha crónica parece bien lejana a las críticas que hoy la primera mandataria realiza en plena cadena nacional respecto del ex ministro.
La crónica de Ámbito en esos días es imperdible, porque permite trazar el mapa de poder político que acompañó a la asunción de Néstor K: “Manzano, ministro del Interior, desde La Rioja viajó directamente a Santa Cruz, previa escala por el aeroparque metropolitano”.
Finalmente, el diario arroja una perlita: “Kirchner tomó juramento a los ministros (…) Como secretario General de la Gobernación (nombró) a Ricardo Jaime“. ¿Quién diría que 20 años más tarde el mismo funcionario aparecería salpicado por una veintena de causas judiciales?
Como puede verse, una vez más se cumple aquel añejo axioma que asegura: “Nadie resiste el archivo”.