Mendoza venía en el fondo de la lista de vacunación contra el coronavirus, sin embargo en los últimos días comenzó a acelerarse el ritmo de inoculación. Asimismo se está dando una baja en la cantidad de casos y en la mortalidad.
Para entender este fenómeno, Christian Sanz y Claudia Durán entrevistaron al jefe del Departamento de Epidemiología, Gonzalo Vera Bello, en el programa que conducen en Radio News.
Al ser consultado sobre cómo se está llevando a cabo la vacunación, contestó que “esa pregunta debería ir dirigida a (la directora de Inmunizaciones del Ministerio de Salud) Iris Aguilar, pero hay un aumento importante en la vacunación desde hace varios días. Pero la estrategia la maneja Aguilar”.
En tal sentido agregó que “esto se carga en un sistema y hay un 80% de primera dosis y un 20% de segunda dosis de acuerdo a lo que está cargado. Eso depende de las personas (que realizan la carga de datos) y en la medida que lo cargan. Se han aplicado en Mendoza 62.461 vacunas”.
Respecto de los contagios, mencionó: “Todos conocemos que cuando empieza la agrupación de gente empieza a aparecer mayor número de casos confirmados, es algo dinámico y lo habrán visto en las fiestas de fin de año, entonces posteriormente empieza a haber un aumento de número de casos confirmados. Ese fue el escenario. Después hubo un amesetamiento que hasta el inicio de las clases… previamente a las clases la gente sale a comprar útiles, guardapolvos, entonces también empieza a haber un aumento, que es lento, una tendencia.
“No tenemos que fijarnos lo que pasa en un día porque esa es una foto que no dice nada, entonces nosotros nos manejamos con semanas epidemiológicas, entonces ahí nos da una idea más acaba con lo que va sucediendo en semanas previas. Acá tenemos un ligero aumento que es lento. Lo positivo es que la mortalidad ha bajado y el número de casos recuperados ha aumentado”, añadió el especialista.
Al ser preguntado sobre qué tan preocupados se encuentran puertas adentro, contestó que “si uno se pone a ver lo que sucede en el resto del mundo, uno no deja de preocuparse. Inclusive en países donde, por ejemplo en Brasil, tiene una alta tasa de casos confirmados y fallecidos estando en la misma estación de verano y tiene también un importante número de casos a pesar del éxito de la vacuna, porque existe todavía en estos fenómenos… no todas las personas son afectadas simultáneamente por la enfermedad, entonces hay gente que no la ha padecido o no se ha vacunado, son personas que se llaman susceptibles. Aparecen estas situaciones de aglomeramiento y son susceptibles, entonces contraen la enfermedad”.
Teniendo en cuenta que en el país en general y en la provincia en particular hay muy pocas dosis aplicadas, se le consultó sobre los motivos por los cuales la cantidad de contagios viene mermando, a lo que respondió: “Tendría muchas respuestas. Primero que la gran mayoría de residencias de adultos mayores el año pasado, casi todos tuvieron casos confirmados por lo que va dejando inmunidad en las personas. Agréguele a ello las vacunas a mayores de 80 años. Ya tenemos dos factores. Las temperaturas también hacen que este impacto sea menor. Después en la pandemia uno tiene un entrenamiento con respecto, no solamente a las medidas preventivas, sino también en los cuidados que hay que hacer posteriormente. Esas medidas que son generales pero no podemos dejar de mencionarlas. Distanciamiento social, uso de barbijo, lavado de manos, es decir, todas esas normas básicas son las que han mermado un poco la pandemia, que se usaban como estrategia en 1918 durante la gripe española por ejemplo”.
Respecto de una eventual segunda ola, destacó que “las pandemias siempre van seguidas de un segundo pico y esta no va a ser la excepción. Imagínese que en la primera tanda hay mucha gente que padeció la enfermedad, pero mucha gente esta susceptible, entonces, no se en que momento, pero sí va a haber una segunda ola de menor magnitud. Estos virus, cuando empiezan a aparecer estas mutaciones, pueden hacer cambiar un poco el escenario pandémico”.