
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, encabezó ayer un masivo acto político en el que criticó la falta de obra pública por parte de la administración de Javier Milei.
“Venimos a denunciar las terribles consecuencias que provocan las políticas de ajuste y desinversión del Gobierno nacional: el parate en obras educativas, de salud o de infraestructura social básica es una decisión criminal”, manifestó desde el acto realizado en la Universidad de San Martín, y al cumplirse 500 días desde el freno dispuesto a las obras nacionales.

Entre los presentes, además de funcionarios de su gobierno, estuvieron los mendocinos Martín Aveiro, Emir Andraos, Gerardo Vaquer y Flor Destéfanis.
Vaquer, al igual que el resto de los mendocinos, se han encolumnado detrás de Kicillof y su Movimiento Derecho al Futuro.
“Acompañamos a Axel Kicillof en el reclamo por 500 días sin obra pública nacional: hospitales paralizados, escuelas en mal estado y rutas peligrosas. Mendoza necesita inversión social urgente. Otra Argentina es posible”, dijo el legislador.

La intendenta de Santa Rosa, por su parte, lamentó lo que “ha significado para los argentinos y santarrosinos en particular” los 500 días sin obra pública.
Y dio un ejemplo concreto de la localidad que comanda. “El ajuste y desinversión del gobierno significó en Santa Rosa: la paralización del primer Polo Educativo, la construcción de 76 viviendas y el asfaltado de 3 barrios completos“.

“N o solo perdimos la posibilidad de tener una mejor calidad de vida, sino también, la generación de puestos de trabajo que generaba la obra pública”, completó.




