En el Senado Provincial se presentó un proyecto de ley para crear, en el área de Desarrollo Comunitario del Ministerio de Gobierno, el Plan Provincial de Prevención y Reducción de Pérdidas y Desperdicio de Alimentos. A través de esta iniciativa, se busca que en Mendoza se incorporen prácticas que contribuyan a manejar con mayor eficiencia y sostenibilidad los recursos alimentarios.
La senadora Claudia Najul (UCR – Cambia Mendoza) explicó los principales puntos del proyecto de su autoría. “Es asombrosa la cantidad de alimentos que se desaprovechan en Argentina y en el mundo. Apuntamos a mejorar la gestión alimentaria, reducir las pérdidas tanto en la producción como en el consumo, y a fortalecer los mecanismos de donación”.
Se calcula que una tercera parte de los alimentos producidos en todo el mundo se pierde o desperdicia. A medida que se descomponen, liberan metano, un gas muy nocivo que impacta gravemente en el calentamiento global, incluso más que el dióxido de carbono. En Argentina, 16 millones de toneladas al año —un 12,5% de todo lo que se produce— se desperdicia.
“Partimos de una base importante. Organizaciones como el Banco de Alimentos y Alimendar trabajan hace mucho en el rescate y redistribución de alimentos aptos para el consumo humano en nuestra Provincia. Lo que proponemos es que, junto con la participación estratégica del Estado Provincial, coordinar esfuerzos entre el sector público, privado y las organizaciones tanto en materia logística como en la recolección y distribución de alimentos aptos para el consumo y de esta forma obtener mayores y mejores resultados”, explicó Najul.
Consultada sobre las razones que la llevan a impulsar el proyecto de ley en este momento, la exministra de Salud hizo énfasis en la situación social. “La pobreza superó el 50% en Argentina y 7 de cada 10 niños son pobres; somos una provincia solidaria y comprometida, pero no podemos dejar todo en manos de la sociedad, estoy convencida de que desde el sector público podemos generar las herramientas, la publicidad y la concientización que hacen falta para que lleguen más alimentos en buen estado a quienes más lo necesitan”.
Para la legisladora, la articulación del Estado con las universidades y las pymes agroalimentarias es una estrategia muy importante, ya que la educación y la producción son sectores muy fuertes e influyentes en Mendoza. “Hay experiencia a nivel nacional, organizaciones y referentes locales. Hay que dar un pasito más para sancionar un marco legal provincial y contar con mayores facultades para hacer una diferencia y combatir efectivamente el hambre, la malnutrición y los efectos ambientales que provoca el desperdicio de alimentos” finalizó la senadora.