Mientras en el interbloque del Frente de Todos en el Senado empezarán a idear la estrategia de rechazo a la disminuida Ley Ómnibus y al paquete fiscal, hay algunas fisuras que complican los planes de la oposición.
Los quiebres vienen, por un lado, por algunas diferencias en artículos claves que avanzaron el martes en la Cámara de Diputados, y las otras diferencias se dan por la postura adoptada por la mendocina Anabel Fernández Sagasti, que rompió el pacto opositor tras el incremento de dietas de la Cámara alta.
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No solo la mendocina es la apuntada, sino que hay algunos legisladores, aliados al gobernador Raúl Jalil, que brindaron su apoyo a la Ley Bases, y sobre todo a la reinstauración del Impuesto a las Ganancias y al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). Además, hay que sumar el revuelo que causó la cuestión de los impuestos al tabaco.
Estos temas no pasaron inadvertidos en el Senado, y ya empezaron a dar que hablar algunos rumores sobre estos movimientos que surgieron a último momento.
El otro punto de quiebre la dejó expuesta a Anabel Fernández Segasti. Resulta que la ‘cristinista’ mendocina no tuvo mejor idea que regresar a Mendoza y dar a conocer que donaría parte de su dieta a escuelas.
Este anuncio no cayó nada bien en la oposición. Incluso, según Infobae, algunos legisladores aliados al modelo kirchnerista le salieron con los tapones de punta. “Resulta que vamos al recinto a poner la cara, con una suba que a algunos nos parecía exagerada y que nos enteramos con poca anticipación, nos comemos los sopapos durante días al regresar al territorio y después, para limpiar culpas, aparecen colegas que van a donar parte de la dieta. Muy peronista todo”, confiaron a Infobae.
