Una adolescente de 15 años que estaba desaparecida desde el domingo pasado en la ciudad tucumana de Las Talitas fue hallada asesinada en el interior del pozo ciego de una vivienda de esa zona.
La víctima presentaba signos de asfixia y de abuso sexual. Como acusado de femicidio fue detenido un hombre de 28, informaron fuentes judiciales.
La víctima fue identificada por los investigadores como Milagros Yumila Valdez, cuyo cuerpo fue hallado el lunes en el pozo ciego de una casa ubicada en el Barrio 180 Viviendas, en la zona de Villa Mariano Moreno, de Las Talitas.
“Se trata de una joven que tenía 15 años, que fue identificada por la familia en el Cuerpo Médico Forense, mientras que el imputado es una persona mayor de edad, de 28 años”, informó al respecto el fiscal tucumano a cargo de la investigación, Ignacio López Bustos.
Si bien en un primer momento fuentes vinculadas a la pesquisa informaron que el sospechoso detenido, identificado como Eduardo Jaime, era pareja de la adolescente, los familiares de la víctima aclararon que solo se conocían, pero no estaban de novios.
De acuerdo con el informe preliminar de autopsia, Milagros murió por asfixia mecánica y presentaba signos de abuso sexual.
En la audiencia de imputación, el auxiliar del fiscal, Guillermo Di Lella, acusó a Jaime por el delito de abuso sexual y homicidio doblemente agravado por femicidio y criminis causa y solicitó seis meses de prisión preventiva.
La hipótesis expuesta por la fiscalía señala que Jaime “llevó a la menor a su domicilio, donde abusó sexualmente de ella y con intenciones de causarle la muerte -para que no cuente sobre la agresión, ya que eran conocidos- y valiéndose de una relación de superioridad y asimétrica de poder, comenzó a golpearla en distintas partes del cuerpo y la asfixió con las manos en el cuello hasta quitarle la vida”.
Después “tomó el cuerpo de Milagros y lo arrojó a un pozo ciego en el fondo de su casa tapándolo con prendas de vestir, con escombros y gran cantidad de pastos”.
El juez interviniente hizo lugar en forma parcial al pedido de la fiscalía, disponiendo cinco meses de prisión preventiva para el imputado, tras lo cual ordenó al servicio penitenciario su traslado a un establecimiento carcelario.
“Con las evidencias obtenidas, están acreditadas la existencia y autoría del hecho por parte del acusado”, sostuvo Di Lella, quien fundamentó el pedido de prisión preventiva en “la existencia de un peligro de fuga por la gravedad extrema de la causa”.
“Se trata de una víctima mujer y menor de edad, doblemente vulnerable, y las consecuencias jurídicas serán las máximas (prisión perpetua), teniendo en cuenta la conducta de esconder el cuerpo en un pozo y taparlo para no ser encontrado”, manifestó el auxiliar fiscal.