El reciente escándalo que dejó mal parado a Daniel Orozco en Las Heras, muestra a las claras la decadencia de la política mendocina. Este caso, y otros tantos contados por News Online, dejan al desnudo que la transparencia en Mendoza no existe.
Si bien a diario la mayoría de los medios locales y nacionales dan cuenta de que en nuestra provincia reina la institucionalidad, nada de esto ocurre.
Por más que por estos lados muchos se jacten de la famosa ficha limpia, o de la tan nombrada por estos días “boleta única”, estas terminan siendo cuestiones menores al lado de los revuelos que terminan saliendo a la luz.
Y mientras muchos medios dedican páginas y páginas para hablar de ello, en Mendoza ocurren situaciones que realmente hacen crujir a la provincia, como lo fue en su momento el subsidio al pastor Héctor Bonarrico, o el regalo que el Gobierno provincial le hizo al polémico empresario Alejandro Spinello, titular de El Azufre.
Pero, pese a los escándalos previamente citados, el mutismo periodístico de los grandes medios hace creer que vivimos en una sucursal de la absoluta institucionalidad.
No se trata ni de radicales, ni de peronistas o de los otros, a la larga o a la corta absolutamente todos terminan cayendo.
Es imperioso dar vuelta la página, la política debe haber un mea culpa y la sociedad necesita de que los medios dejen la complicidad de lado e informen de una buena vez.
