Hace muchísimos años, un pasante de la carrera de periodismo le planteó a su jefe que le costaba escribir una nota, a lo que el editor le dijo: “Sólo tenés que contar lo que viste, nada más”. Así de sencillo debería ser nuestro trabajo, contar lo que pasa.
Claro que para contar lo que vemos, es necesario saber de qué se trata, quiénes, dónde, cuándo, y de ser posible, por qué y para qué.
Pero a las famosas preguntas básicas, las cuatro W, es imperioso agregarle actitud y buscar más, asociar y también tener un poco de suerte. No me canso de decirlo, es sumamente importante tener actitud, por más repetitivo que suene.
Claro que por estos lados, las condiciones de trabajo y las largas jornadas de trabajo no ayudan mucho a la tarea periodística. Las discusiones por diferencias de criterios o de opinión joden a cualquier tipo que pasó alguna vez por una redacción.
Por todos estos motivos, es que cada periodista debe defender a su nota como la mejor, la más importante y la que hará inquietar a los de arriba.
Y si, es cierto, en Mendoza los de arriba suelen complicarnos la tarea a los trabajadores de prensa. La famosa y tan nombrada pauta, hacen que los aprietes sean una práctica cada vez más común por estos lados.
En nuestra provincia, la mayoría de los medios dedican páginas y páginas a contar cosas que realmente poco le interesan al mendocino de a pie. Por lo general esto tiene que ver con órdenes que llegan de arriba, y que provocan que muchos colegas agachen la cabeza y opten por mirar hacia el costado, causando una preocupante desinformación.
Con muchísimo orgullo puedo decir que a lo largo de nuestra corta trayectoria, News Online jamás se dejó extorsionar, ni apretar por los poderosos de turno. Con su pequeña estructura, y respaldados por los accionistas que decidieron darle para adelante por más complicada que sea la cosa, el puñado de periodistas que a diario escribe estas páginas nunca cayó en el mutismo que persiguen muchos gobernantes.
Quienes a diario hacemos News Online jamás nos desviamos de nuestro objetivo, contar lo que pasa, sobre todo en Mendoza.
No nos inquietó ni nos inquieta hacer saber algo que pasa, más allá de quien quienes estén implicados. Con errores, y también aciertos, avanzamos sin callar nada y sin caer en parcialidad alguna.
El periodismo es y debería ser así, por más que hoy en día nos quieran adormecer y alejarnos de la realidad diaria.
