La senadora provincial Mercedes Rus presentó un proyecto de ley que busca desalentar el mercado ilegal de bienes muebles usados. La iniciativa busca evitar los ilícitos de aquellos productos que generalmente se comercializan luego de haber sido robados.
En concreto, “la medida pretende realizar una modificación integral de la Ley 8.124 que ha quedado obsoleta, y prácticamente en desuso, en los tiempos que corren”, detalló.
La legisladora explicó que el proyecto “atiende varias aristas, yendo al fondo de la cuestión, permitiendo trabajar en la trazabilidad sobre la existencia, el origen lícito y la identidad del vendedor de los bienes. De esta manera, también se trabaja en la prevención mucho antes de que se pacte un lugar de encuentro”.
Además, señaló que “en la actualidad no existe ninguna regulación al respecto, que permita verificar la veracidad o licitud del origen del bien a la venta, y esto es importante, sobre todo ante la proliferación de las transacciones vía redes sociales”. En tal sentido, indicó que uno de los puntos más importantes de la modificación de la Ley 8.124 es “la creación de un registro informatizado para asentar las operaciones y constatar el origen del bien, entre otros datos”.
La propuesta tiene un doble objetivo. La senadora informó que “por un lado, se pretende reemplazar el viejo sistema analógico que regulaba la compra y venta de bienes muebles usados, que funcionaba a través de obleas adhesivas, libros en papel, constancias en duplicado, entre otras. Y por el otro, se busca permitir la verificación de origen lícito de bienes muebles, mediante un código único de verificación que permita la trazabilidad”.
De este modo, el proyecto apunta a sistematizar los registros para que se pueda controlar a quienes se dedican a la compra y venta de productos usados, sumando también las bicicletas al registro. Mediante la informatización “cualquier persona puede registrar un bien mueble con su factura y obtener así un código de verificación”. A modo de ejemplo, Rus sostuvo que “cuando hay un allanamiento, los bienes muebles son difíciles de recuperar. Si uno los registra en el sistema, sería más fácil lograrlo”.