Sergio Marinelli, el superintendente General de Irrigación, brindó este jueves en el departamento San Rafael el pronóstico de caudales para la temporada 2022/2023. El funcionario develó los números de los distintos ríos de Mendoza y la situación será critica.
“En todos los ríos estamos en el orden del 40% y el 52% de un año medio. Saben que el año medio es el promedio de los años anteriores, con lo cual cada año malo baja la vara. No es lo mismo el 40% de la media este año, que la media de 5 años atrás”, apuntó Marinelli durante la exposición.
“Esto no es circunstancial. No es una crisis pasajera, es una nueva normalidad“, agregó el funcionario sobre la crisis hídrica.
El panorama de cada uno de los ríos
El pronóstico para el Río Mendoza indica que se espera un derrame de 800 hm³, posicionándolo en una sequía severa.
Por otro lado, el río Tunuyán, indica que le espera una sequía hidrológica severa. Otro que camina a la parte es el río Diamante, donde se espera un derrame de 400 hm³ y con sequía hidrológica extrema.
Para el río Malargüe se espera un derrame de 125 hm³, lo que representa el 41% del año normal para la sección de aforos de La Angostura. El informe clasifica el año hidrológico con sequía severa.
Mientras que para el río Grande se espera una sequía extrema. El derrame será de 1330 hm³.