El ataúd de la Reina Isabel II está siendo trasladado en este momento hacia la Catedral de St. Giles, ubicada en Edimburgo. La acompaña gran parte de la población y junto a ella se encuentran sus cuatro hijos.
Permanecerá allí para un servicio de oración y reflexión al que asistirán el rey y la reina consorte y miembros de la familia real. También asistirá una congregación compuesta por “todas las áreas de la sociedad escocesa”.
Posteriormente, el ataúd reposará allí durante 24 horas para permitir que el público lo vea, en una tradición conocida como yacimiento.
Después del servicio, el rey regresará a Holyrood donde tendrá una audiencia con la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, seguido de una reunión con el presidente del Parlamento escocés. Carlos III, acompañado de la reina consorte, acudirá más tarde al Parlamento escocés para recibir una moción de condolencia.
En la mañana del lunes 19 de septiembre, declarado feriado público en todo el Reino Unido, terminará el acto de engalanamiento de la reina.